Una luna roja se cierne sobre lo que a veces es un Tokio desconcertantemente tranquilo, cubierto con la ropa de sus habitantes ahora desaparecidos. Las luces están encendidas. La música de las muchas tiendas cercanas todavía resuena en las calles. Es inquietante en parte porque, a veces, se siente como poco más que una noche inusualmente tranquila, pero una creciente inquietud es profunda. Luego, una colegiala sin cabeza que vuela te patea y mata un poco el ambiente.
Esto es GhostWire: Tokyo, el último lanzamiento de Tango Gameworks, desarrollador de The Evil Within. Es una nueva generación de terror para el estudio, esta vez apoyándose en la acción llamativa y una estética un poco más amistosa y colorida que sus espeluznantes antepasados. Todavía hay fantasmas y sustos para disfrutar aquí, pero en el fondo es una lista de verificación de mundo abierto con una apariencia de terror efectiva y algunos de los efectos y animaciones más vistosos que existen.
Juegas como un joven llamado Akito, que se encuentra bendecido (o tal vez maldecido) con una gran cantidad de poderes mágicos y elementales. Rápidamente te unes a tu aventura el ahora fallecido detective KK, quien resulta ser el responsable de tu sorprendente habilidad para controlar el fuego, el agua y el viento a tu voluntad. En general, probablemente sea bueno que este bicho raro en particular haya decidido unir fuerzas contigo, ya que un evento paranormal sacudió Tokio y provocó que la mayoría de su población desapareciera, solo para ser reemplazada por un ejército de demonios y fantasmas de folclore japonés. Por lo tanto, depende de ti y de tu nuevo amigo recorrer las calles, resolver algunos misterios y mejorar tus poderes para enfrentarte a más enemigos y más complicados.
En la práctica, GhostWire: Tokyo equivale a una aventura de mundo abierto bastante práctica. Al principio, se le presenta un mapa considerable oscurecido por la niebla que deberá despejar gradualmente, desbloqueando así más tareas para completar y coleccionables para capturar. Esta niebla está en todas partes cuando estás empezando, y te matará si te entretienes en ella. Eso significa que su progresión a través de Tokio es en gran medida lineal, ya que lo guían de una misión a otra y de un área a otra.
Es una forma bastante plana y llena de escenas de comenzar, y el juego en general todavía no ha encontrado su equilibrio para mí. El combate, por ejemplo, es extrañamente lento y estático desde el principio, solo ayudado por la grandiosidad de los poderes: un hechizo de viento de fuego rápido para objetivos individuales, un hechizo de agua para socavar grupos y un hechizo de fuego explosivo para cuando las cosas. ponte muy feo. Estoy seguro de que podría mejorar allí a medida que sigo desbloqueando más habilidades y mejorando las que ya tengo, pero hay una pequeña desconexión entre el espectáculo que se muestra y la falta de opciones de movilidad de tu personaje durante las peleas. Si un enemigo, o uno de sus ataques a distancia, se acerca demasiado, solo puedes bloquear o saltar al azar y alejarte corriendo. Se siente como si faltara un botón de esquivar.
Fuera de la explosión en primera persona, sus opciones cuando se trata de moverse por el mundo son definitivamente mejores. Puedes lidiar con pequeñas criaturas voladoras que se encuentran en ubicaciones determinadas para llegar a los tejados y encontrar algunos espíritus importantes. También noté que una habilidad posterior te permite invocar a estos pequeños por ti mismo, lo que sin duda hará que la caza transversal y coleccionable sea menos complicada.
Hablando de buscar espíritus, esto es a lo que dedicará gran parte de su tiempo cuando esté fuera de casa. Puede comprarlos con facilidad y luego dispensarlos en una de las muchas cabinas telefónicas mágicas para ganar algo de XP y dinero en efectivo. Me gusta la idea de aspirar gradualmente a todos en Tokio y luego enviarlos fuera de la ciudad a través de un teléfono sobrenatural para que, con suerte, puedan volver a su forma humana.
Son los detalles pequeños y extraños como estos los que más disfruto hasta ahora: las rarezas visuales aleatorias que ocurren cuando simplemente te estás relajando, desde destellos de las sombras de personas que no están allí hasta persianas que se portan mal. Y para aquellos de ustedes que no se han cansado del todo de acariciar animales virtuales, aquí hay un montón de ellos para alimentar y pasar un rato. Además, incluso puedes leer sus mentes y comprar algunos obsequios de los simpáticos yōkai que ahora se instalaron en las tiendas locales.
Akito y KK también están creciendo en mí con el tiempo. De vez en cuando tienen un poco de diversión de ida y vuelta, siendo el primero el hombre heterosexual estándar atrapado en una situación salvaje y el segundo siendo a partes iguales cansado del mundo y excéntrico. Son una pareja decente, aunque todavía es demasiado pronto para decir qué tan interesante podría ser el elenco más amplio, dado que solo he visto los dos primeros capítulos del juego.
Entonces, si bien existe la sensación de que su estructura familiar y su juego de momento a momento pueden ser demasiado seguros, los divertidos estilos de terror y los puntos ocasionales de excentricidad del juego le otorgan a las calles muertas de Tokio un poco de vida.
GhostWire: Tokyo se lanza el 25 de marzo en PS5 y PC. Para ver otros juegos que se lanzarán este año, asegúrese de consultar nuestra guía de lanzamientos de videojuegos.
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